Otoño de 2013 - La Energía Sigue al Pensamiento

Otoño 2013

Como resultado del pensamiento enfocado «en el corazón», el ojo espiritual se abre y se transforma en agente director. A.A. Bailey

Estimado amigo:

El significado del lenguaje —y de cada palabra— se está ampliando constantemente con el fin de abarcar la diversidad creciente de la experiencia y el conocimiento humanos. La palabra ‘campo’, por ejemplo, siempre ha sido capaz de evocar imágenes apacibles de pastizales verdes, de vistas familiares y de sonidos del campo; pero en esta época científica, puede llevar igualmente la imaginación hacia un campo electromagnético o cuántico —un mundo de fuerzas invisibles donde las misteriosas partículas subatómicas aparecen y desaparecen de la existencia—. Se evocan dos mundos completamente diferentes de imágenes, cualidades y sentimientos, a través del significado ampliado y de la fuerza evocadora de una sola palabra.

El físico sabe bien que un campo más sutil sustenta la ilusión de la escena rústica que él está contemplando; el esoterista también sabe, a su vez, que esto es una ilusión. Más aún, por detrás de ambos existe otro tipo de campo, uno de «cualidades vivientes». Este campo es el reino de la intuición, y a él se accede por medio del corazón. Es aquí donde se debe buscar lo que en Los trabajos de Hércules se ha denominado la cierva de la intuición, porque es esquiva y desaparece ante el menor disturbio de pensamientos mundanos. Para poder capturar a la cierva, se requiere un largo y arduo trabajo de amor; pero todos los que buscan en el silencio del corazón pueden captar «el eco suave de pasos distantes, un destello del oro viviente en las profundidades del bosque nocturno». Cuando se sigue la pista con perseverancia, un día aparecerá la cierva y de repente se abrirá el reino oculto de la intuición.

Aquellos que han capturado a la cierva y pueden trabajar conscientemente en el campo de la intuición, lo hacen por medio del «ojo espiritual» abierto, que sirve como un agente director bajo una ley fundamental oculta: La energía sigue al pensamiento y se sujeta a él. El pensamiento se construye con deliberación a fin de encarnar ideas y cualidades específicas en consonancia con el Plan Divino y de dirigirlas al mundo para que estén a su servicio. Incluso antes de que se abra este ojo, es posible trabajar con esta ley a través del empleo de la imaginación creadora. A medida que aprendemos a pensar con el corazón, descubrimos que las percepciones que allí tenemos se vuelven magnéticas y que este magnetismo aumenta cuanto más cavilamos sobre ellas y visualizamos su aplicación práctica en el mundo de los asuntos humanos.

Un trabajo experimental de esta naturaleza se lleva a cabo en el Ciclo de Conferencias, focalizado específicamente en las conferencias internacionales. Al utilizar la voluntad al bien, el grupo procura energizar la forma mental iluminada que se forma por medio de las conversaciones y deliberaciones de los participantes de la conferencia. Los colaboradores en todo el mundo visualizan innumerables corrientes de energía que están conectadas a la forma mental; y a través del ojo de la mente, el corazón iluminado de la forma mental es constantemente avivado por la mirada grupal, aumentando así el poder de su radiación.

Otra manera de servir con la ley «La energía sigue al pensamiento» es a través del trabajo de Triángulos. En este trabajo, un grupo de tres personas se vinculan diariamente por medio del pensamiento y la meditación para invocar las energías de luz y buena voluntad, y su visualización cooperativa hace circular estas energías a lo largo de toda la red de triángulos que rodea el planeta. El empleo de la Gran Invocación es fundamental para orientar la energía mental hacia este servicio, porque «allí donde se centra la atención, ahí se arraigarán las potencias descendentes de acuerdo a la inspiración mántrica». Consultar: www.lucistrust.org/es/triangles

Para aquellos de nosotros que participamos en estos tipos de actividades de servicio, el significado de la palabra ‘campo’ se ha ampliado hasta abarcar la idea de la conciencia grupal y de las relaciones telepáticas. El empleo de la imaginación creativa permite que esta palabra abarque un sentido más profundo de la realidad. A menudo, las palabras familiares transmiten un significado más profundo en las enseñanzas de la Sabiduría Eterna, y la imaginación creativa es una gran colaboradora en la tarea de explorarlas. En el libro Luz en el Sendero leemos: «Hay otra manera de leer, que es, verdaderamente, la única útil respecto a algunos autores. Es leer, no entre líneas, sino entre palabras. En resumen: es como descifrar una cifra profunda. Todas las obras de alquimia están escritas en la cifra de que hablo; ha sido usada por los grandes filósofos y poetas de todos los tiempos. Los Adeptos la emplean sistemáticamente en lo que se refiere a la vida y los conocimientos; y dando aparentemente su más profunda sabiduría ocultan en las palabras mismas que la constituyen el verdadero misterio»¹

En las obras de Alice Bailey, las palabras están dispuestas de manera específica con el propósito de formar una geometría de poder que resuena en la mente del lector; y las palabras corrientes pueden transmitir una perspectiva más profunda porque detrás de ellas se hallan las cualidades vivientes que están procurando penetrar en la conciencia humana. En este contexto, el significado de una palabra, por ejemplo, como ‘Paz’, se transfigura en «un punto premeditado de tensión en la cabeza y el corazón, que impulsa los tres aspectos divinos de voluntad, amor e inteligencia, a una actividad simultánea y en consonancia con la voluntad de Dios». En la actualidad, esto puede no ser más que un concepto interesante, pero algún día la idea que se halla detrás de una palabra será claramente comprendida y experimentada, como lo es hoy un campo de hierba debajo de nuestros pies.

Así pues, vemos los medios por los cuales el lenguaje puede ampliarse para abarcar no sólo la diversidad creciente de la experiencia y el conocimiento humanos, sino también su cualidad. Esto se tomó en consideración cuando fueron escritas las enseñanzas de la Sabiduría Eterna; y se nos pide que las proyectemos mentalmente en la conciencia pública. Por esta razón hemos elegido trabajar con el tema «La energía sigue al pensamiento» en nuestros próximos seminarios de Buena Voluntad Mundial en Nueva York, Ginebra y Londres. Vamos a estudiar cómo la dirección del pensamiento grupal puede fluir de manera adecuada a fin de anclar potentemente nuevo significado, cualidades y principios en la conciencia humana y ayudar a desarrollar un nuevo lenguaje del espíritu. Se le invita cordialmente a participar en estos acontecimientos.

En la luz de la visión grupal,

LUCIS TRUST

1 Luz en el Sendero, Mabel Collins